viernes, 13 de junio de 2008

CONCIERTO Y DISCO A LA VISTA


Es para mí un gran placer anunciar que, tras innumerables diálogos y continuos cambios de opinión, los chicos de "Silent Scream" se meten por fin en un estudio para grabar su primer disco. En un principio la idea común del grupo era grabar una maqueta con los seis nuevos temas, y, depende de las opiniones, plantear el reto de grabar un disco. Pero, después de ver el resultado con uno de los temas nuevos que grabamos en el mes de mayo, la idea ha ido evolucionado hasta llegar a la conclusión de que, por la calidad y las ganas, lo mejor era hacer un disco de una vez por todas. Serán unos once o doce temas: rescataremos cuatro de los antiguos, los seis nuevos y uno instrumental, que posiblemente dará el nombre al disco. La verdad es que estamos todos muy ilusionados y con unas ganas locas de meternos a grabar. Se prevé que la reclusión se llevará a cabo el día 12 de Julio, tras el concierto que haremos en Gavá el día anterior, donde nos sacaremos las telarañas. Os iremos informando de todo cuanto pueda acaecer durante este mes.

Dani Alpáñez

viernes, 30 de mayo de 2008

CAÍDA EN MOTO


Yo y los vehículos de dos ruedas no nos entendemos. Cuántas veces le habré dicho a mi preciosa GSR que el asfalto está duro y que las reparaciones en el taller son muy caras. Pero ella no me ha hecho caso, y después de nueve meses de perfecta relación, hemos tenido que pelearnos. El caso es que el domingo pasado, de vuelta a casa tras la jornada de trabajo, me fui al suelo a 70/80 km/h al perder la dirección delantera en una vía con curva ratonera de incorporación a la AP-7, a la altura de El Papiol. Es cierto que el pavimento estaba muy mojado, pues había llovido, pero ni me plegué demasiado en la curva ni tampoco iba haciendo el cabra. Pero son cosas que pasan. Bueno, la caída, al más puro estilo Moto GP, tan sólo me provocó una rascada en la mano derecha y un susto de tres pares de cojones. Fui arrastrándome mientras veía cómo la moto también se arrastraba soltando chispas hasta el muro de contención. Eso fue lo que más me dolió, y no la mano. Aún en el suelo, un vehículo se detuvo y un hombre salió para interesarse por mi estado; yo era un flan. Llamó a los mossos, que aparecieron enseguida, y éstos llamaron a la ambulancia, que también apareció en poco tiempo. Al parecer, se había producido otro accidente no hacía mucho tiempo y rondaban todos por allí. Pero también apareció otro vehículo: el que llevaba a cuatro compañeros de trabajo. Al verme en el arcén se pararon y salieron del coche a toda prisa. Dani, ¿qué te ha pasado?, dijeron con las manos en la cabeza. Na´, que me he ido al suelo, respondí tembloroso. Betsy, una de las compañeras, por poco se desmaya al ver toda mi mano ensangrentada y con pieles colgando. Me hicieron la prueba de alcoholemia, me pidieron los papeles, me atendieron en la ambulancia y la grúa se llevó la moto. Lo peor ha sido aceptar el coste de la reparación de la “niña”. ¡2300 EUROS! Intenté dar pena en el concesionario, pero no coló. Así que toca pagar. Les doy las gracias a Betsy, a Sandra, a Francesc y al que llevó la moto hasta un lugar apartado de la vía por hacerme compañía durante todo el suceso. Y a Betsy y a Sandra les debo un café por ir a verme a urgencias y llevarme a casa en coche tras salir del Hospital de Bellvitge. ¡¡¡Señoras y señores, ESTOY VIVO y podré continuar dando guitarrazos con los de Silent!!!

Dani Alpáñez